miércoles, 23 de marzo de 2016

La manzana


Fue la manzana. No fui yo. Les juro. Fue la manzana. Tentadora manzana. Toda la vida nos dijeron que no, que la manzana no. Pero la manzana..., a la manzana no le importa. La manzana es el sí. La manzana es lo que vos quieras que sea. Y yo quiero que sea mis alas. Las de él, las de ella, las de todos. Seamos con alas. Seamos, estemos vivos, libres y con alas. Y nadie puede venir a decirte de dónde venís, ni a dónde deberías ir, ni lo que se supone que deberías ser. Vos podes decidir quién sos, a dónde vas y en dónde querés estar. Estemos, seamos vivos, no nos quedemos atados de las costumbres a las que nos acostumbraron. Que lo que nos hace humanos es que somos animales; que los animales tienen y siguen instintos, que los instintos son placeres, que los placeres nos satisfacen. Tengamos instintos, seamos placeres. Tengamos placeres, seamos distintos, que nadie puede definirnos, que nada puede limitarnos. Seamos y estemos vivos, mordamos más manzanas.

PH: Michelle Egas