Asquerosa esa costumbre de provocar incertidumbres.
Somnolienta esperanza. Molestia de descanso. Marco de tensión.
Insólita y temprana.
Malhabida esa costumbre.
Capricho conformista. ¿Otra vez?
¡Ja! Y la mar en coche...
No importa quién empieza. Importa cómo, cuándo y por quién, se termina.
3 comentarios:
No importa quién empieza. Importa cómo, cuándo y por quién, se termina.
jaja
eso me gusto
mmm te amo lo sabes
me cuelgo, te colgas y hace mucho q no te veo..
vacaciones.... mucho de q hablar...
la abstinecia mata... jajjaa
mel o melon o quien vos quieras q sea ( menos batman)
y dale fin, dale.
dale.
jaja.
Y no importa el tamaño de la barca, sino el balanceo del mar!
El camino tanto en bus, como en papel manteca sobre lodo, es justificado solo con el fin.
sino ni daaaa! visteeess! jej
♥
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