jueves, 5 de mayo de 2011

Enojo Vol. I

Estoy realmente enojada con el ser humano. Especie de mierda si las hay.
Y es que, ¿no se enojaría usted también?
Pienselo.
Vivimos en un mundo en donde la última persona premiada con el Nobel de la Paz es el presidente de la única Potencia Militar del mundo.
¿Y si nos replanteamos algunas cositas?

lunes, 2 de mayo de 2011

Sobre verse de nuevo


En el alto piso de la incertidumbre, y traté de hacer incomprensibles estas palabras...
Costaba mucho asumir lo que no pasaba. Y no me di la oportunidad de salir de este cuerpo.
Esos verdes y azules podían transformarse en estos amarillos y grises. De hecho, lo hicieron y entonces el otoño nos golpeó en la cabeza.
¿Se fueron con el verano o los eché con la caida de las hojas?
No me olvido de los labios y de las manos de todos ellos. Pero hoy no quiero tenerlos presentes. Reflejos viejos.
Entonces, camino y me voy por los ríos. Quisiera mojarme los pies y sentir frío.
Y Soledad nunca quiso estar sola. Y Luci Dulci se olvidó de los demás. Y Clementina rogó por su propia clemencia. Y Victoria se hartó, se cansó. Se alejó cada vez más del fracaso. Pero, ¿acaso no es eso lo que buscó cada una?
La única valiente es la que no se estanca. La única que se va es la que después volverá con la frente en alto.
Todas ellas piensan en sus viejos reflejos y hoy, yo me enfoco en el nuevo.
No se preocupe usted, divina elegíaca, que todo el tiempo predico cosas nuevas. No se precipite usted, hermosa parte de mí, que no todo lo que escribo lo publico. Pero sí todo lo que publico es lo que de mí muestro.
El resto es mío. Lo demás es nuestro.
Así que, brindemos las dos. Y brindemos porque somos una sola.
Salud.