Y leyendo un poco de filosofía, encontré una frase de Joan Paul Sartre, la cual decía lo mismo que se lee en el título de este post.
Un pequeño análisis de esto:
Las personas siempre eligen entre diversas alternativas. Aún en las situaciones más dramáticas, los hombres eligen qué hacer. Incluso, el decir que no se es libre, es una elección. No elegir, o delegar en otros las responsabilidades es también una elección. Quienes dicen que no son libres, han elegido ser personas que niegan su libertad. Estamos condenados a ser libres porque no podemos no elegir, porque no somos libres de dejar de ser libres.
Luego pensé: Pero al vivir en una sociedad, el estado limita tu libertad. Las leyes la limitan.
¿Y un preso? No puede elegir estar preso o no. Al estar preso no tiene libertar de salir a la calle.
Y me retruqué: Cada uno elige diferentes posibilidades dentro de su situación. Un preso, puede elegir, tener una mala conducta dentro de la carcel, o estudiar mientras cumple su condena, o planear una fuga. Pero está eligiendo. Sigue siendo libre. Todo ser es libre, dentro de sus limitaciones.
Además, cabe destacar que a lo que se refiere es a la libertad de elección como bien dije en un principio. No que todos pueden elegir hacer lo que se les canta, cuando se les canta.
Para que alguien sea responsables de sus actos tiene que haber actuado libremente, tiene que haber podido elegir entre una cosa u otra. Y haber tenido conciencia de lo que hacía.
Este blog ha vuelto a ser lo que nunca fue. Un espacio cultural.
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